Hoy en día hay muchas variantes de póker, y entre la gran variedad que muchos jugadores de póker distinguen está el Stud.
Es un juego de siete cartas que utiliza una baraja de muchas cartas. Así, puede haber más combinaciones y las probabilidades de ganar, en comparación con el póker clásico, aumentan. Las reglas de este juego se basan en el hecho de que cada ronda de juego necesita un enfoque diferente, y durante la partida el comportamiento del jugador de póquer cambia. Tienes que crear tu propia estrategia, de lo contrario tus posibilidades de ganar serán escasas.
En cuanto a las reglas del juego, es posible comprender rápidamente todo si se tienen conocimientos básicos de póquer o si el jugador de póquer estaba previamente familiarizado con el proceso. Pero siempre hay que seguir los requisitos y tener un enfoque adecuado para el análisis.
Para los principiantes, esta variante es casi imposible, pero los jugadores profesionales entienden bien las peculiaridades y son capaces de jugar con éxito. Pero hay que estar preparado desde el principio para saber que no va a ser fácil.
Todo comienza cuando los jugadores hacen una apuesta. En cuanto al tamaño, todo depende del límite en la mesa. El croupier se fija, y luego sigue el reparto. Cada jugador recibe una carta abierta que es visible para todos los oponentes y otras 2 que sólo el propio jugador conoce. Después de que el juego en sí comienza, es necesario entender todos los detalles a la vez, después de lo cual el proceso en sí se hará más clara y las posibilidades de ganar aumentará.
La tercera calle es la primera ronda. Y todo comienza con el jugador que tiene la carta más débil, dor – abierta. Y si 2 jugadores tienen esa carta, entonces se tiene en cuenta el palo, la secuencia es la siguiente:
Y una vez seleccionado el primer jugador, apuesta. Pero es importante que el tamaño sea 2 veces el ante en el póker. El propio jugador puede no hacer una apuesta, pero entonces está fuera del juego. El siguiente jugador será el de la izquierda, sigue pujando. Y después de hacer la contribución, todos los demás jugadores se unen al juego. Puede hacerlo:
La ronda termina en una situación en la que todos los jugadores han apostado. También puede darse la situación de que el jugador de póquer vaya directamente a por todas y los demás se retiren, y entonces se lleve el bote.
La cuarta calle es la segunda ronda. Aquí el repartidor distribuye otra carta a los concursantes y éste la recibe con la camisa abajo. Entonces se elige al jugador que tiene la carta más alta, y éste apuesta. Cada uno de los jugadores mantiene esa apuesta, la aumenta o la retira, según su criterio. Todo transcurre en el sentido de las agujas del reloj y termina cuando todos han hecho una apuesta.
Las calles quinta y sexta son las rondas 3 y 4, que son muy similares entre sí. En cada caso, el crupier entrega otra carta y toda la acción se repite. De nuevo, el que tiene la carta más fuerte es el primero en apostar.
River es la quinta ronda. De nuevo cada jugador de póker recibe una carta, pero es una carta boca arriba. El jugador que comenzó en la ronda anterior será el primero en moverse. Si este jugador se retira, el derecho a moverse se traslada al siguiente jugador en la dirección de la flecha. Después de las apuestas se produce el showdown, que es la apertura de las cartas. Las combinaciones se suman y se revela el ganador.